Queridos amigos,
En el mensaje a Mirjana del 18 de marzo, la Reina de la Paz nos un extraordinario consejo para caminar con fruto en nuestro camino cuaresmal.
En primer lugar nos invita a mirar "de manera sincera" y "con amplitud de miras" en nuestros corazones, para ver lo que hay en él. Dejemos que vengan a la luz todo la oscuridad que encontremos en él; sin rechazarlo, ni domesticarlo, no justificándonos, incluso si lo que encontramos es horroroso.
Luego la madre nos pide: "¿Dónde está mi Hijo en vosotros y el deseo de seguirme hacia Él?” La Virgen está aquí tanto tiempo para esto, para que nuestros corazones se abran al amor de Jesús. Y si Jesús aún no ha vuelto, es porque todavía estamos a tiempo de decidirnos por Él, y porque no somos los dueños del tiempo
La verdadera renuncia, a la cual debemos dirigir a nuestros semejantes, es a la renuncia del pecado. Para ello la Virgen nos invita a escuchar nuestro corazón, diciendo: “¿Qué es lo que Dios quiere de mí personalmente? ¿Qué debo hacer? Escuchemos, pues, y decidamos.
Hagámoslo a la luz de un amor infinito: “Nuestra Señora ha mirado a todos los presentes y ha continuado: si supierais cuanto os amo lloraríais de felicidad”
Continuemos el camino cuaresmal con la oración, el ayuno y las obras de misericordia y viviremos una Pascua inolvidable.
Vuestro, Padre Livio.
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